Hoy especialmente os quiero hablar desde el corazón

Siempre lo hago pero hoy creo que espongo más mis sentimientos. Realmente sentía la necesidad de hacerlo.

Me apetece compartirlo con vosotros ya que siempre estáis ahí.

Este blog empezó y continua siendo un espacio “nuestro”, de todos nosotros y de nadie más. Es un espacio sin ningún interés comercial. El único interés es el gozo y disfrute personal de reunirnos y compartir experiencias, sentimientos y conocimientos. También la oportunidad de estar un poquito más cerca de vosotros que siempre se agradece.

¿ Por qué “Testimonio de una actriz” ?

Por que hoy pretendo mostraros un poco la realidad de mi profesión, la cuál amo, pero en muchos momentos me hace frágile y vulnerable.

Aunque también podría titularlo “Testimonio de una chica normal”.

Porque de lo que os voy a hablar ahora le puede pasar a cualquiera, a cualquier persona, hombre o mujer y en cualquier tipo de trabajo.

Debemos saber y tener claro quiénes somos para que ciertas cosas en la vida no nos hagan daño ni nos resquebrajen nuestra autoestima o nuestra alma.

Tengo muchísimas anécdotas para contar… pero las últimas son las que realmente me han propulsado a escribir este post.

Como la mayoría sabéis, soy ACTRIZ.

Esto no significa que me guste salir en la tv, esto es algo mucho más profundo y vocacional.

Evidentemente si lo que buscas es ser famoso o salir en la tv tienes otras vías más rápidas y eficaces para este tipo de fin.

Ser actriz para mi significa CREAR. Crear y meterte en la piel de otras personas, de otros “personajes”, vivir varias vidas en una. Ser parte de una obra artística. Ser actriz significa dejarte la piel trabajando, estudiando, formándote, leyendo, aprendiendo de grandes compañeros, para que cuando tengas la oportunidad de interpretar un personaje seas capaz de ser un perfecto canalizador de emociones, sentimientos, sensaciones… Y ser capaz de hacer llegar la historia que quieres contar. Liberarte y olvidarte lo maximo posible de quién eres tú para poder ser otro.

Además de considerarme actriz me considero artista y lo digo sin tapujos, puede ser por mi parte algo atrevido por la grandeza de la palabra “Artista”, pero así lo siento y así me siento. Todo lo que motiva mis actos, mis aficiones, mis gustos y mi vida tienen un detonante común, lo artístico, lo creador.

Desde muy pequeña mi vida ha estado dedicada a mi profesión. Tanto mi formación como mi tiempo libre, todo gira entorno a ella.

Tras contaros esto y poneros un poco en situación del significado de ser actriz entenderéis un poquito mejor de lo que os voy a hablar ahora.

Puede ser que desde fuera, la gente que no conoce mi profesión de cerca la vea algo frívola, pero eso es simplemente una apariencia irreal.

Nos veis en algún evento muy arregladas, bien vestidas y dentro de una burbuja de glamour y superfiacialidad. En el fondo somos chicos y chicas normales con muchos sueños y trabajando duro por nuestra vocación.

Todo eso es un escaparate atractivo que dista mucho de la auténtica realidad que vivimos diariamente.

La realidad es que diariamente vivimos en una lucha constante a la cual casi siempre vamos sin armadura, sin escudo y sin espada, todo lo contrario, luchamos lo más vulnerable que podemos. ¿Por qué? Precisamente para poder ser otro, para ser actores. Evidentemente nunca abandonamos nuestro ser, pero le damos prioridad al que debe contar la historia. Nos peinamos, vestimos, hablamos, sentimos, reaccionamos, movemos … como pensamos que el o ella lo haría.

En esta lucha de la que os hablo tenemos que tener mucho cuidado de no salir mal paradas.

Afortunademente me dedico a lo que me gusta y vivo de ello, pero también es cierto que no trabajo todo lo que me gustaría. Me gustaría trabajar más y tener muchas más oportunidades de las que tengo, pero soy consciente de lo complicado que es y la cantidad de buenas compañeras que tengo en mi misma situación o en situaciones mucho peores, algunas compañeras nunca han tenido la oportunidad. Me entristece sobremanera. Es una profesión difícil pero maravillosa, te lo da todo pero también te hace sufrir mucho.

De todo esto soy muy consciente aunque aun a sabiendas nos cueste asimilarlo y nunca lleguemos a estar del todo preparadas, pero mi mundo es así.

Cuando nuestro trabajo llega a vosotros lo que veis es el resultado, la emisión de una serie, el estreno de una peli o vais al teatro a disfrutar de una buena obra de teatro. Pero antes de esto y detrás de esto hay mucho más.

Mucho mucho más…

Al igual que en otros trabajos os enfrentáis a una entrevista de trabajo, en la que cuentan vuestros estudios, vuestra experiencia…

En nuestra profesión nuestra entrevista es un casting.

El famoso “CASTING”

A él nos enfrentamos diariamente, bueno, miento, ojalá fuera diariamente, eso significaría que tenemos muchas oportunidades y que optamos a muchos proyectos pero la realidad no es esa.

Ni accedemos a todos los proyectos que quisiéramos ni a todos los castings para tener la oportunidad de mostrar nuestro trabajo.

Cuando tenemos un casting, una audición, una prueba.. vamos con toda la ilusión y profesionalidad. A estas pruebas “casting” les dedicamos mucho trabajo, tiene horas de estudio y preparación para llegar a tu casting y hacerlo lo mejor posible. Siempre manteniendo los nervios a raya para que no te jueguen una mala pasada. En este pequeño momento, unas veces en 15 minutos o 30 minutos debes demostrar que tú eras la actriz adecuada para vestir al personaje.

Una vez sales del casting toca esperar a que todos los astros, que son muchos, se alineen para concederte la oportunidad de hacer lo que te gusta.

INTERPRETAR

Al año quizá tenga la oportunidad de acceder a unas 5 pruebas, unas veces algunas más, otros años algunas menos, otros años cuesta tener 1 oportunidad, sí, una. Esa es mi estadística y aún así trabajo y debo sentirme afortunada, de tan pocas posibilidades que al final consiga algunas es todo un éxito teniendo en cuenta también la competencia tan grande que hay. La competencia no es mala, al contrario, nos hace mejores, hace que nos exijamos más. Pero creo que nos merecemos más oportunidades, y hablo en nombre de todas mis compañeras y compañeros, aunque también es cierto que es bastante más cruel y exigente con el género femenino que con el masculino.

Ser actriz es un deporte de elite y ademas de riesgo, ahora entenderéis el porqué.

En esta lucha vivimos cada día, en esta desazón, ilusión, euforia, alegria, desilusión, zozobra … Una montaña de sentimientos diarios siempre encabezado por la confianza de uno mismo y la esperanza.

Vivimos en una inestabilidad constante, nunca podemos confiarnos, siempre alerta, siempre en la línea de salida para continuar la maratón.

Es fácil hacer tambalear nuestra confianza, estamos muy expuestos, con todas las ilusiones y expectativas puestas sobre la mesa. Es nuestro trabajo, nuestra profesión, nuestra vida…

LA RESPUESTA SE HACE ESPERAR Y NO SIEMPRE LLEGA

En algunas ocasiones hacemos un casting y tras pasar los días ni si quiera tenemos una respuesta, tras nuestro trabajo lo único que encontramos es la indiferencia.

En otras ocasiones cuando queremos acceder a un proyecto nos podemos encontrar con respuestas tan “acertadas” como:  “Es muy mayor para el personaje” ( El personaje tiene mi edad y ni si quiera se han tomado la molestia de conocerme en persona)    Te quedas desconcertada, desorientada sin saber como actuar o como interpretar las palabras. Mi cara suele ser un cuadro cuando escucho este tipo de comentarios  que pueden dañar nuestra autoestima. “¿Qué edad creen que tengo?”  Vas rápidamente al espejo y te revisas. “No me veo arrugas… ¿Por han dicho eso? ¿En serio estoy mayor?”.

Después te encuentras en otra prueba con el comentario contrario…

“Es muy joven”.

“¿?” “¿?”…

Aquí alivias la preocupación del anterior comentario pero sumas uno nuevo, así continuamente.

“Es que es demasiado mujer…”

”¿?”

A todo esto debo decir que antes de esto suele haber comentarios del tipo:

“Me encanta!! La prueba extraordinaria. Que buena actriz es… Pero no.”

Este es nuestro día a día… Esperando la respuesta…

Ilusiones y desilusiones conviven casi simultáneamente

Hasta que llega el Sí.

El SÍ

“Nos encanta y la queremos para el personaje”.

Como comprenderéis siendo actriz, siendo creadora, se me escapan muchas veces este tipo de comentarios superficiales y sin profundidad alguna. “¿Todo el trabajo que he dedicado y esa es la respuesta?…” Comentarios frívolos y basados simplemente en un físico. ¿En serio? Ser actriz es otra cosa desde mi punto de vista. Entiendo que existan lo “perfiles”, aspectos físicos que más o menos se imaginan para cada personaje. Pero no dejan de ser eso, perfiles, nosotros estamos formados para interpretar diferentes personajes, no para hacer de nosotros mismos, eso es muy aburrido, pero parece que si el personaje no es exactamente como tú… no cuadras. Pero lo que no entiendo es cierto tipo de comportamientos y respuestas, sobre todo cuando ni siquiera te han visto en persona ni te conocen o no te dan una oportunidad. No entiendo nada. Bueno, igual yo sí que lo entiendo, pero algunas personas parece que no.

Con esto no quiero generalizar, porque tengo la suerte de encontrarme con gente estupenda, profesional, que te trata con cariño y respeto cuando se trata de exponerte de tal manera, cuando hacemos un casting, gente que valora tu trabajo y le da la valía que le corresponde cuando nos enfrentamos a una prueba. Evidentemente no siempre tiene que ser un Sí, hasta uno mismo a veces siente que no encaja en determinados personajes por cualquier motivo. Pero ese es otro tema.

¿DÓNDE QUIERO LLEGAR CON TODO ESTO?

No creais todo lo que os dicen. Lo que algunos dicen sin pensar, como excusa o para no decir un NO, muchas veces es más dañino.

Aquí tenemos que hacer un trabajo de autoestima y de saber valorarnos con realismo para que este tipo de comentarios no nos afecten. A mi me pasa en mi profesión pero también puede pasar en vuestro día a día o en vuestros trabajos.

En definitiva no dejéis que os dañen, sed fuertes, luchad, creer en vosotros mismos porque eso será lo que os haga avanzar en lo que os propongáis.

No le deis a nadie el poder de desvalorarlos.

Siempre que sean criticas constructivas tomadlas y aprender de ellas y el resto, desechadlas, no merecen que le dediquemos ni uno de nuestros pensamientos.

CONFIAD EN VOSOTROS MISMOS Y SOBRE TODO QUEREOS MUCHO

Desde aquí también quiero mandar un mensaje a todas mis compañeras, a todas esas actrices maravillosas que luchan a diario.

SOIS MARAVILLOSAS

Espero que con este post os hayáis acercado un poco más a mi, a nosotras, a nosotros, gente normal, con sueños, frágiles, vulnerables que de vez en cuando salen en la tv , en el cine o en un escenario para hacer lo que más les gusta y por lo que llevan mucho tiempo luchando y trabajando.

Os espero el próximo domingo en algún lugar a escondidas dónde abrir nuestro corazón y hablar sin pelos en la lengua.

Aquí soy la jinete de este bonito corcel que galopa libre.

CRISTINA ALARCÓN