Paraísos increíbles a 2h de Madrid

Este finde he tenido la oportunidad de visitar otro paraíso.

Unos amigos nos han invitado a su casita de montaña de  “La Vera” en la Sierra de Gredos.

Un lugar increíble. Reúne paz, naturaleza, gastronomía, deporte y escondites que no se pueden desvelar.

La Vera es famosa por contar con una gran diversidad de flora y fauna. Ello es debido, entre otros determinantes factores como la situación geográfica y el clima, a la abundancia de arroyos y gargantas. Estos transportan el agua procedente del deshielo de las cumbres de la Sierra de Tormantos, hasta el río Tietar, donde todas desembocan. La mancomunidad cuenta con 46 gargantas. Las más importantes son las del municipio de Garganta la Olla, así como las de Alardos, Minchones, Gualtaminos, Cuartos, Jaranda y Pedro Chate. En su recorrido alguna de ellas cuentan con bellos puentes romanos o medievales.

Puente de dos columnas, y yo río. Tú, río derrumbado, y yo su puente abrazando, cercando su corriente de luz, de amor, de sangre en desvarío.

-Blas de Otero

Sus “Gargantas” son las responsable de atraer a cantidad de amantes de la naturaleza. Cuentan con lugares de un paisaje incomparable. Aquí puedes disfrutar de las mejores “Pozas”. La Pozas son balsas de agua, que el rio a su paso por la roca crea. Son piscinas naturales en medio de la montaña. Las piedras pulidas por la erosión del agua al precipitarse sobre ellas crea lugares muy confortables para tomar el sol. El frescor del agua cristalina más la calidez de la roca expuesta al sol hacen el “combinado” perfecto para pasar un día a todo confort.

La naturaleza es sabia y nos ofrece los mayores lujos que no se compran con dinero. No solo nos ofrece un lugar de baño, también existen “jacuzzis”, “camas hidromasaje”, “toboganes”, “chorros hidromasaje”, “zona solárium”… Todo creado por la naturaleza y en un marco incomparable e irreproducible.

En un lugar como el que describo nos llevó nuestro amigo Guillermo. Es un lugar secreto para él y para su pareja, Ana, por lo tanto no puedo dar indicaciones de cómo se accede hasta el lugar exacto para respetar sus deseos, pero si os puedo decir que estamos hablando de La Garganta de Chilla en el municipio de Candeleda. Basta perderse por cualquiera de estas gargantas para encontrar lugares fascinantes.

El río sigue su brutal correr, mas al pasar frente al poeta, amansa su delirio, y las aguas, acariciando las raíces, han labrado el remanso.

-Ricardo Güiraldes

Como es lógico, cuanto más subas la garganta hacia la montaña mayor privacidad e intimidad encontrarás. La gente y las familias se suelen quedar en zonas de más fácil acceso, donde tener el coche cerca. Si te decides a hacer una excursión y asciendes montaña arriba la recompensa no tardará en llegar.

Guillermo y Ana tienen una casita estupenda en un balcón hacia un campo de higueras frente a la Sierra de Gredos, presidida por el Pico Almanzor. Despertar cada mañana y desayunar contemplando la inmensidad de las montañas y la belleza del valle que las rodea, no tiene precio.

Para acceder a la casa lo hacíamos desde Madrigal de la Vera, un pueblito de la zona con mucho encanto. En este pueblo, cada sábado por la mañana hay un “mercadillo” donde poder comprar productos de primera calidad. Muy recomendable visitarlo.

Hemos pasado unos días extraordinarios.

Contemplar cada noche un cielo tan estrellado… te transmite serenidad. Dos noches plagadas de estrellas fugaces. Incluso se aprecia la Vía Láctea.

No debemos tener miedo a equivocarnos, hasta los planetas chocan y del caos naces estrellas.

– Charles Chaplin

Seguro que volveremos para perdernos en sus paisajes en la mejor de la compañías.

Os espero el próximo Domingo con otro secreto para sumar a la lista. Shhhhh… No se lo digáis a nadie . 😉

Cristina Alarcón